Kóoch Green Cosmetics, es la firma independiente de Cosmética Orgánica que apuesta por productos naturales, materias primas de alta calidad y de procesos de elaboración responsables, veganos y certificables.

Su compromiso con el medio ambiente y su calificación como marca Honesta, son los pilares claves que hicieron a Kóoch Green Cosmetics, ser parte de los Slowbestfriends.  Cada mes publican para Slow información puntera y curiosidades sobre el mundo de la cosmética Orgánica. El post de hoy: Curiosidades del uso de la cosmética a lo largo de la historia.

La cosmética se utiliza desde hace siglos con el objetivo de embellecer la piel y el pelo. Los primeros vestigios del uso de cosmética se remontan al antiguo Egipto. Tanto hombres como mujeres decoraban sus ojos con kohl y sus mejillas de color rosa. Ellos pensaban que ser atractivos era una forma de acercarse a los dioses. Así que la belleza en esa época era fundamental tanto en la vida como en la muerte. En esa época Cleopatra se bañaba en leche de burra mezclada con miel. Y también se tiene evidencia del uso de desodorantes, aceites, tónicos de la piel y otros productos que elaboraban a base de harina, levaduras, miel, arcilla y aceites.

En Roma y Grecia la belleza también ocupó un lugar destacado. Tanto hombres, como mujeres, en particular de las clases más ricas, se preocupaban por su aspecto exterior. En esos años se usaba mucho la lanolina, una sustancia grasa de color amarillo blancuzco que se obtiene de la lana del cordero y de los caballos y que hoy se sigue usando en cosmética. Otros ingredientes naturales que ya se utilizaban en la época de romanos y los griegos eran el aceite de oliva, la cera de abeja, la rosa, el jazmín…

Con la llegada de la Edad Media la higiene, tan importante entre los romanos (los baños termales vienen de ese periodo histórico), pasó a un tercer plano.

Con el Renacimiento, la belleza vuelve a ser importante y se inspiran en el mundo clásico para admirar los cuerpos armoniosos, la tez blanca, y los labios y mejillas ligeramente rojos. Adquieren también importancia los perfumes. Para elaborar los cosméticos se usaban ingredientes como limón, hojas de salvia, albayalde, vino tinto, etc.

A partir del siglo XX, los productos de belleza dejan de ser un lujo exclusivo de los ricos y la industria cosmética se populariza. Y ya en el siglo XXI vuelve con fuerza el interés por los productos naturales para cuidar la piel y el cabello.

De los remedios de la abuela a la cosmética natural- Kóoch Green Cosmetics

Aunque nunca hemos dejado de usar ingredientes caseros para cuidarnos (¿quién no se ha hecho una mascarilla de huevo para el pelo? Sin embargo, en los últimos años el sector de la cosmética natural está viviendo una auténtica revolución. Cada vez hay más personas interesadas por la belleza más natural, como la que promueve Kóoch Green Cosmetics embajadores de Slow, a través de su línea AMEM: Los aceites de diferentes plantas están presentes en todos los productos de la gama: aceite de oliva, como el que se usaba ya en la antiguo Roma, aceite de onagra, de avellana o de sésamo. El aloe vera, utilizado desde la época de los egipcios, como planta medicinal, es otro ingrediente presente en algunos de los productos de Kóoch Green Cosmetics como el Contorno de Ojos multi-efecto antioxidante o en el Agua Micelar Natural. La manteca de karité, usada desde hace siglos en África por sus propiedades hidratantes y curativas excepcionales, está presente en la Crema natural AMEM.